ALPES SEPTIEMBRE 2012

Hacemos una incursión en los Alpes y en terreno conocido, para acompañar a unos amigos a la cima del MontBlanc. Nos vamos a Chamonix y para abrir boca subimos en el teleférico de Aiguille de Midi para dormir en el "plateu" bajo el refugio de los Cósmicos.

Normalmente intentamos prescindir de este tipo de aparatos mecánicos, no por "puretas", sino porque la montaña en sus faldas suele guardar espacios y paisajes preciosos, como son frondosos bosques alpinos de abetos, en los que predomina el sonido de los pájaros, entre floridos prados alpinos. Pero en esta ocasión y como no hay más remedio y no hay tiempo para más nos subimos a esa prodigiosa obra de ingeniería que supuso el teleférico de la Aiguille.

Tras dejar el teleférico y preparar el material en el tunel de hielo, nos metemos en pleno descenso al plateau a través de la afilada arista que exige mucha atención, porque en ocasiones presenta un tramo muy afilado y hay que "andar al loro"...

Teleferico de Aiguille.

Túnel de hielo a la salida del teleférico.

Salida por la arista de la Aiguille.

Ya en el plateau y al atardecer, un gigante, el Gran Combin. 


Las luces del atardecer tiñen de bonitos colores los seracs bajo los que pasaremos mañana y por donde asciende este solitario montañero.

Al salir para la cima podemos ver las luces de los frontales de quienes se dirigen al MontBlanc, que deben madrugar bastante.

Dormimos en el plateau en una noche estrellada y salimos por la mañana en pleno amanecer hacia el MontBlanc de Tacul, que nos sirve de aclimatación y de campo de pruebas para los más "novatos". La ascensión es sencilla, si bien el a veces precario equilibrio de los seracs y la presencia de una gran grieta exigen atención y una cierta celeridad. El acceso a la cima tiene una pequeña trepada en la que disfrutamos de una bonita trepada. la verdad es que las vistas desde la cima son bastante más espectaculares que del mismo MontBlanc, del que destaca la afilada arista de Peuterey.

Aiguille de Midi y plateau en el que dormimos.

Sorteando las grietas del inicio de la ascensión.


Llegando a la parte final.

Llegada a la cima.

En la cima, con el Tacul y el MontBlanc al fondo.

Gran Combin, Rimpfischhorn y Cervino desde la cima. 

A continuación el track del Mont Blanc de Tacul:

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3359650

Bajamos a Chamonix y nuestro siguiente objetivo es ya el MontBlanc, que para parte del grupo es el objetivo principal del viaje a Alpes. Subimos en el tren cremallera que sale de Saint Gerbais con algo de pena, porque la subida desde les Houches parece preciosa, pero la ascensión de esa forma resulta muy larga y no tenemos tiempo, y utilizamos este medio para acercarnos al inicio de la ruta. La subida al refugio de Tete Rouse se realiza por un buen camino. A partir de ahí hay que vencer una empinada ladera en terreno mixto por las últimas nevadas y pasar por la famosa "bolera", en la que las piedras que caen de la parte superior son la bola y sobra decir quien es el bolo... salimos indemnes del paso, pero una chica que baja un poco delante es evacuada en helicoptero tras la caída de una gran piedra que desde luego pasa muy cerca en medio de los nervios generalizados. IMPRESCINDIBLE el casco y sobre todo mucha atención para no tirar piedras a los que se encuentran por debajo, hay mucha mucha gente!!!.

Helicoptero de rescate sobre el refugio de Tete Rouse y la "bolera".

Ascensión tras la bolera por un espolón rocoso, arriba se aprecia el refugio de Gouter.

Ya en la parte superior encontramos cadenas y sirgar para asegurarse.

Y llegamos al refugio de Gouter.

El nuevo refugio de Gouter, creo que nosotros seremos los últimos en utilizar el viejo, que ya tiene incluso fecha de derribo.

Salimos temprano, a media noche. La noche es buena, no sopla el viento y no hace demasiado frío, pero paramos un rato a esperar a los compañeros en el refugio de Walot y se quedan las manos heladas. El ritmo es bueno, vamos adelantando a la serpiente de pequeñas lucecitas que va ascendiendo hacia la arista de Bosses. La ruta está en muy buenas condiciones y disfrutamos de un amanecer llegando a la cima formidable, sin duda un momento inolvidable.


Amanecer desde la arista de Bosses.

La sombra del MontBlanc se proyecta en el horizonte a la salida del sol.

Las luces de la mañana se van apoderando de los valles y las montañas.

Y crean bellos juegos de luces.

Y tras mucho esfuerzo, la llegada a cima y para muchos eso supone cumplir un sueño que ha estado mucho tiempo en la cabeza ...

Pero en la cima hace frio y tras la celebración de todos, nos vamos para abajo.


El Weishorn en la lejanía.

A continuación el track al refugio y al MontBlanc:

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3359652

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3359654

Y tras los días en el macizo de Chamonix y la partida de la mayor parte del grupo de vuelta a casa con el MontBlanc en la retina, nos vamos al valle de Gressoney, para ascender el Castor. El plan original de partir al Cervino queda olvidado por las malas condiciones de esa montaña. Antes de nuestro viaje estuvo nevando y el día de descanso en Chamonix ha llovido a mares, quedando el Cervino tapizado de nieve, quedará en nuestra mente para otra ocasión mejor... Vamos a Gressoney, en el valle de Aosta.

El valle de Gressoney nos recibe con frío y un fuerte viento otoñal, pero el tiempo tiene que mejorar.

El sendero al refugio de Quintino Sella está perfectamente marcado. 

Y en la arista final encontramos hasta ¡un puente!.


Refugio Quintino Sella.

Lyskam desde el Quintino Sella.

El Gran Combin arde al atardecer.

El alojamiento en el Quintino Sella es muy agradable. tenemos todo el refugio para nosotros y 2 chicos de santander y nos preparan para cenar unos Gnoquis bue-ni-si-mos.

Salimos al amanecer y los primeros rayos apuntan a las cimas del MontBlanc y en Gran Combin. El viento arrecia con fuerza en algunos momentos y levanta nubes de la nieve reciente de los pasados días.En la parte superior el frío es intenso, pero la jornada no es muy larga y a final de mañana volvemos al refugio después de pasar por la cima del Cástor.

MontBlanc.

Gran Combin.



El viento arrecia en la arista cimera donde hay que poner cuidado de no perder el equilibrio.

Aparecen el Overgabelhorn, la Zinalrothorn y el Weishorn, montañas que quedan en nuestra memoria para futuras ocasiones.

Y ya visible la cima del Castor.




Preciosa cima la del Cástor y muy recomendable para disfrutar de un día tranquilo no muy ajetreado. En el refugio recogemos todo y nos vamos para abajo al valle de Gressoney. Caminando, hasta el coche. 
Aquí el teleférico está apagado y no lo utilizamos y realmente merece la pena caminar el estrecho sendero que por prados y un bosque de alerces nos lleva hasta Stafal. Y en el que podemos disfrutar de la fauna autoctona como este íbice, preparado ya con reservas para el frío invierno, que en poco tiempo caerá sobre estos lugares.


¡¡Los alpes, siempre espectaculares, nunca defraudan!!!

Ahí va el último track al Quintino Sella y al Castor:

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3359682

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3359684



Picos de Gabietos-Taillon y Pico de Fenez

Hace unas semanas nos fuimos al valle de Bujaruelo. Ordesa es recorrida por miles de personas y sin embargo el cercano valle de Bujaruelo aun conserva esos rincones en el que uno puede encontrarse con la belleza y la soledad al mismo tiempo.

Y eso que en esta ascensión encontramos poca soledad, porque vamos un grupo realmente grande... pero disfrutamos con amigos de un gran día de montaña.

Nos calzamos las botas y salimos muy temprano, como hora y media antes de que salga el sol... claro que al final resulta un poco inutil el madrugón, porque la escasez de luz unida al poco conocimiento que tenemos del inicio del camino, son una mala combinación y andamos un tanto perdidos por el bosque la primera hora de marcha... pero una vez rencontrado el camino el ascenso se realiza con rapidez.

Recorremos un inclinado y bello bosque de pinos y abetos y salimos a los altos pastizales de montaña al amanecer. En la parte superior y ya en el barranco de Gabietos entramos en terreno basicamente rocoso y un fuerte viento bastante helador, nos recuerda que se acaba el verano y nos amarga un poquico el día. El viento nos obliga a redoblar la atención en la arista Sur de Gabietos que aunque no tiene grandes dificultades, no permite que nos relajemos demasiado. Desde el Gabieto, continuamos ruta hasta el Taillón por terreno rocoso y de sencilla trepada y de su cima, bajamos a Bujaruelo por la ruta normal, pasando por la brecha de Roldán y el refugio de Sarradets, donde se disfruta de una de las maravillas del Pirineo, el circo de Gavarnie. Bella y larga jornada pues... ahí van unas fotillos.

Las primeras luces sobre las cimas de Otal y tendeñera.

Ya en la arista Sur del Gabieto.



Recorriendo el último tramo de la arista.


Tras la cima del Gabieto bajamos al collado entre éste y e Taillón y continuamos la cresta hasta éste.

Ya bajando del Taillón trasponemos el dedo de Bazillac en la imagen.

Y llegamos a la famosa brecha de Roldán.

Y aparece el circo de Gavarnie.

Esas nubes que forman hilos o hebras alargadas en el cielo son la muestra de fuertes vientos en altura.

Y estas también, sobre el gran macizo del Vignemale.

Y de sarradets iniciamos el largo descenso que nos lleva hasta Bujaruelo.

Al día siguiente ya en "petit comite" nos vamos al pico de Fenez. Es un pico de modesta altura que nos quedaba por ascender en la zona, pero no por ello menos hermoso. Aprovechamos la ascensión para visitar la cueva helada de Fenez. El que tenga ganas de visitarla que vaya pronto, porque el cambio climatico está acabando con estas hermosas grutas a pasos agigantados...

El Gabieto desde el valle del turbón y que ascendimos ayer.

El valle que sube por el barranco del Turbón es un lugar de gran belleza.

Llegando al gran agujero abierto en la caliza en la cueva de Fenez.


Y su lago helado... hay que caminar con precaucion. 

Gran boca de la cueva de Fenez. Se puede observar nieve en su interior a pesar de ser finales de agosto.

En la cima del Pico de Fenez con el sector de Ordesa-Monte Perdido al fondo.