ZERMATT-CERVINO

Resulta imposible dejar de mirarlo. El Cervino o Matterhorn atrae nuestra mirada como si fuese un imán y nunca desaparecen  las ganas de pisar algún día su afilada cima... Y es que en la vida, es fundamental tener siempre muchos... Quien sabe, quizás algún día pase a formar parte de una larga lista de buenos recuerdos.



Montagnon D´Iseye y Pic de Chérue

Y ya volviendo al invierno actual, nos vamos a uno de los valles sin duda más bonitos del Pirineo, el valle de Ossau, con sus escarpadas cimas y sus extensos bosques de hayas y abetos, y donde aun pueden llegar a encontrarse huellas de los esquivos y escasos osos pirenaicos.

El valle se encuentra dominado por la esbelta e imponente figura del Midi D´Ossau, que atrae como  un imán nuestra vista y en ocasiones hasta nuestros pasos.

Y después de un fin de semana en el que disfrutamos de toda su belleza y nos sentimos colmados, llega el siempre triste momento de la despedida, en el que no podemos decir otra cosa que hasta pronto...



El Midi va despertando de la oscuridad de la noche








Amoulat y Grande Arcizette

Pico de Soques


Midi de Bigore en la lejania

Balaitous y Pallas






Pico Anie

Midi D´Ossau imponente


Vistas de la región de Ossau


En la cima de Montagnon D´Iseye

Con el Midi al fondo





Picos de Cezy















Picos del Infierno y Lurien

Y las últimas ascensiones antes de las vacaciones nos llevaron al valle del Gállego y a la vertiente francesa para ascender los siempre grandes Infiernos y el Pic Lurien.

En la buena compañía de Francis, nos dirigimos a esas cimas, de las más bellas de Pirineos y en su cima como siempre dejamos volar nuestra imaginación y soñamos con ascender otras muchas miles de veces... en un camino sin final y simplemente porque en ellas alcanzamos la FELICIDAD con mayúscula...