Y para completar las ascensiones en Tabernes, nos vamos a los Picos de Culfreda. Se trata de las tres cimas de Culfreda, que se enlazan en 15 minutos una vez alcanzado el Culfreda principal (3034 mts). Para ello ascendemos al puerto de la Madera. Empezamos a través de un bonito bosque de pinos y servales, continuamos reodeados de matas de rododendros y finalizamos por pastos. Durante el ascenso, los sarrios permanecen atentos a nuestra presencia, disfrutando del calor del verano y se alimentandose sin descanso ante la cercanía del proximo invierno, que estas montañas llegará en pocos meses.
La ascensión nos lleva al puerto de la Madera y una vez allí progresamos por los negros y desmenuzados canchales de pizarras. Una vez en el collado no hay más que seguir el cordal hasta las rocosas cumbres.
En el descenso disfrutamos del vuelo de los Buitres Leonados y del fugaz paso de un solitario Quebrantahuesos, una escasa rapaz en grave peligro de extinción, todo un placer verla...
Culfredas al amanecer.
Las noches son frías y aparecen las primeras escarchas.
Subimos hacia el puerto de la Madera.
Sarrio vigilante.
Subiendo hacia el cordal.
Los Culfredas al frente.
Punta Suelza y Punta Fulsa.
El cordal es largo, pero se recorre rapidamente con un poco de atención.
Llegando al último de los Culfredas.
Volviendo hacia el Culfreda central.
Cumbre principal.
Buitre Leonado.
Y un solitario Quebrantahuesos.
Culfredas ya en el descenso.
Valle de la Pez.
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