PUNTA ESCARRA 2748 mts
Los 14º bajo cero de la noche no son suficientes y tras dormir en la furgoneta y a pesar de ellos, nos vamos para arriba a disfrutar una magnifica ascensión y a quitarnos una espinita que tenemos desde hace varios años, cuando ya intentamos ascender a la cima en unas condiciones similares.
Partimos de Formigal a las 7:30 horas y tras ascender por las pistas con las primeras luces llegamos a lo alto de la estación. Desde allí atravesamos la cabecera del valle de Izas para alcanzar la base del corredor Norte de Escarra. Se trata de un canal de unos 400 metros de desnivel y una pendiente de unos 45º. La nieve está algo inconsistente y cuesta subirlo.
Al llegar a lo alto del corredor, ya vemos la piramide rocosa de Punta Escarra y tras varios pasos de mixto, alcanzamos los ultimos largos de nieve que nos llevan a la cima.
Llegamos a la furgoneta ya de noche y bastante exhaustos, tras 11 horas caminando a muchos grados bajo cero. A nuestra llegada la temperatura es de -10ºC, el día ha sido ¡¡¡helador!!! pero sin duda ha merecido la pena volver a Punta Escarra.
ANDALUCIA
Decidimos dirigirnos en el último puente del año a Andalucía para visitar Granada, Sierra Nevada y Cordoba. La intención es aprovechar el escaso buen tiempo que anuncian y realizar la integral de los 3000 de sierra nevada que une todas las cimas de más de 3000 metros que hay en ese lugar, al tiempo de visitar unos monumetos unicos como son la Alhambra y la Mezquita-Catedral de Cordoba.
En granada nos recibe una lluvia pertinaz, que más bien parece de cualquier ciudad del norte de España, pero después el tiempo se calma y podemos visitar la Alhambra en un día fantastico.
Vistas de Granada desde la habitación del hotel
La Alhambra desde el barrio del Albaicin
Granada desde el hotel
El Albaicin desde el interior de la Alhambra
El palacio de los Nazaries una autentica joya de la arquitectura arabe
Tallas delicadas en la pared del Palacio
Jardines desde la Alcazaba
Patio de los leones
Jardines y edificio del generalife
Albaicín desde la Alhambra
Antigua puerta de la Alhambra en pleno otoño
Tras las visitas en Granada y las comodidades y el lujo de un buen hotel, nos vamos para la montaña. Estamos en diciembre y el pronostico no es bueno, con algunas nevadas previstas y fuertes vientos, pero aun así, vamos para Jerez del Marquesado, donde se inicia nuestra dura travesía. La montaña no dará mucha opción. Los fuertes vientos nos detienen por la tarde y resulta imposible caminar. La temperatura prevista es de -10ºC y la fuerza del viento nos detiene por la tarde en las llamadas piedras de los ladrones, tras las que nos resguardamos y montamos la tienda, dispuestos a pasar una fría y turbulenta noche.
Y nos vamos para la montaña, con un frio intenso
Ya se aprecian las montañas a las que nos dirigimos, aquí el sol nos reconforta un poco
Picón de Jerez hacia el que nos dirigimos, pero hay que salvar un buen desnivel
La ventisca aparece en la zona superior y nos detiene en seco, el frio es muy intenso
Y aquí hemos dormido, ayer era dificil montar la tienda e incluso caminar
No haremos la travesía pero ascendemos el Cerro Pelao y el Picón de Jerez
El frío y el viento lo han congelado todo
Y el viento se ha llevado toda la nieve y ha moldeado formas curiosas
Al fondo el Mulhacen y la nube sobre el no pronostica buen tiempo
Nos vamos para abajo, esta vez no será. A la tarde comienza a llover y a nevar en la zona con fuerza
Abajo Jerez del Marquesado
Tras esta pequeña espinita que se nos clava nos vamos a Granada y nos recuperamos en unos baños arabes, que resultan sensacionales para cargar las pilas. De ahí y en vistas del buen pronostico para el día siguiente, nos vamos a las alpujarras, a Trevelez, para ascender el Mulhacen en el día
En la antecima del Mulhacen con el mar mediterraneo al fondo, aquí no llega su calor
Cima del Pico Mulhacen
Cabra Montesa en Sierra Nevada
Alpujarra Granadina
Y tras quitarnos esa pequeña espinita, nos vamos a un bonito pueblecito de Cordoba, Priego de Cordoba y de ahí a la capital, donde visitamos, como no, la Mezquita-Catedral, que es espectacular. De ahí son las ultimas fotos.
Decidimos dirigirnos en el último puente del año a Andalucía para visitar Granada, Sierra Nevada y Cordoba. La intención es aprovechar el escaso buen tiempo que anuncian y realizar la integral de los 3000 de sierra nevada que une todas las cimas de más de 3000 metros que hay en ese lugar, al tiempo de visitar unos monumetos unicos como son la Alhambra y la Mezquita-Catedral de Cordoba.
En granada nos recibe una lluvia pertinaz, que más bien parece de cualquier ciudad del norte de España, pero después el tiempo se calma y podemos visitar la Alhambra en un día fantastico.
Vistas de Granada desde la habitación del hotel
La Alhambra desde el barrio del Albaicin
Granada desde el hotel
El Albaicin desde el interior de la Alhambra
El palacio de los Nazaries una autentica joya de la arquitectura arabe
Tallas delicadas en la pared del Palacio
Jardines desde la Alcazaba
Patio de los leones
Jardines y edificio del generalife
Albaicín desde la Alhambra
Antigua puerta de la Alhambra en pleno otoño
Tras las visitas en Granada y las comodidades y el lujo de un buen hotel, nos vamos para la montaña. Estamos en diciembre y el pronostico no es bueno, con algunas nevadas previstas y fuertes vientos, pero aun así, vamos para Jerez del Marquesado, donde se inicia nuestra dura travesía. La montaña no dará mucha opción. Los fuertes vientos nos detienen por la tarde y resulta imposible caminar. La temperatura prevista es de -10ºC y la fuerza del viento nos detiene por la tarde en las llamadas piedras de los ladrones, tras las que nos resguardamos y montamos la tienda, dispuestos a pasar una fría y turbulenta noche.
Y nos vamos para la montaña, con un frio intenso
Ya se aprecian las montañas a las que nos dirigimos, aquí el sol nos reconforta un poco
Picón de Jerez hacia el que nos dirigimos, pero hay que salvar un buen desnivel
La ventisca aparece en la zona superior y nos detiene en seco, el frio es muy intenso
Y aquí hemos dormido, ayer era dificil montar la tienda e incluso caminar
No haremos la travesía pero ascendemos el Cerro Pelao y el Picón de Jerez
El frío y el viento lo han congelado todo
Y el viento se ha llevado toda la nieve y ha moldeado formas curiosas
Al fondo el Mulhacen y la nube sobre el no pronostica buen tiempo
Nos vamos para abajo, esta vez no será. A la tarde comienza a llover y a nevar en la zona con fuerza
Abajo Jerez del Marquesado
Tras esta pequeña espinita que se nos clava nos vamos a Granada y nos recuperamos en unos baños arabes, que resultan sensacionales para cargar las pilas. De ahí y en vistas del buen pronostico para el día siguiente, nos vamos a las alpujarras, a Trevelez, para ascender el Mulhacen en el día
En la antecima del Mulhacen con el mar mediterraneo al fondo, aquí no llega su calor
Cima del Pico Mulhacen
Cabra Montesa en Sierra Nevada
Alpujarra Granadina
Y tras quitarnos esa pequeña espinita, nos vamos a un bonito pueblecito de Cordoba, Priego de Cordoba y de ahí a la capital, donde visitamos, como no, la Mezquita-Catedral, que es espectacular. De ahí son las ultimas fotos.
SAN DONATO 1493 mts.
Esta vez nos vamos a todo un clasico y uno de los montes más bonitos de Navarra, San Donato-Beriain. Esta vez nos acompañan Javi y como no, Ulises, que se conoce esto como la palma de su mano, ya que era el principal lugar de entrenamineto de su amo.
La tarde otoñal tiene un color especial en este lugar y la excursión resulta una gozada, aunque el viento gelido que sopla en la cima, anuncia la proximidad del invierno y nos obliga a bajar rapidamente con mucho frío en las manos, aprovechando las últimas luces del día.
Esta vez nos vamos a todo un clasico y uno de los montes más bonitos de Navarra, San Donato-Beriain. Esta vez nos acompañan Javi y como no, Ulises, que se conoce esto como la palma de su mano, ya que era el principal lugar de entrenamineto de su amo.
La tarde otoñal tiene un color especial en este lugar y la excursión resulta una gozada, aunque el viento gelido que sopla en la cima, anuncia la proximidad del invierno y nos obliga a bajar rapidamente con mucho frío en las manos, aprovechando las últimas luces del día.
PEÑA DE IZAGA
Hace muchisimo tiempo que no voy a Izaga, quizás demasiado y la montaña está muy cambiada desde mi ultima visita la primavera pasada. El pasado 23 de julio un terrible incendio, ayudado por la incompetencia de "algunos", provoca que 825 hectareas de monte queden calcinadas.
En muchas ocasiones había ascendido a Izaga por esos lugares que en algunos puntos ya no es más que un cementerio de cenizas y la impotencia es grande. He ido de noche, para no ver demasiado, pero aun así la imagen es horrible, ya me habían avisado.
Con la luz mortecina de mi frontal voy recorriendo lo que antes eran preciosos parajes de bojes y hayas y ahora solo son restos de cenizas y troncos ennegrecidos y sin vida. No se adivina ningún resto de vida en el lugar, ni pajaros, ni roedores, ni jabalies, ni ciervos, nada de nada y así será por mucho tiempo.
La humedad de una noche de noviembre, se junta con el olor a cenizas, a hojas secás y a tierra quemada, dando lugar a un olor que resulta incluso desagradable, olor a muerte en el bosque. La erosión provocada por el incendio avanza y no hay signos de recuperación. El lugar no volverá a ser el mismo.
Contaminación luminica de Pamplona
Las estrellas aun siguen en el cielo
Restos calcinados de un boj junto al camino
Restos calcinados de lo que antes eran frescos hayedos
Hace muchisimo tiempo que no voy a Izaga, quizás demasiado y la montaña está muy cambiada desde mi ultima visita la primavera pasada. El pasado 23 de julio un terrible incendio, ayudado por la incompetencia de "algunos", provoca que 825 hectareas de monte queden calcinadas.
En muchas ocasiones había ascendido a Izaga por esos lugares que en algunos puntos ya no es más que un cementerio de cenizas y la impotencia es grande. He ido de noche, para no ver demasiado, pero aun así la imagen es horrible, ya me habían avisado.
Con la luz mortecina de mi frontal voy recorriendo lo que antes eran preciosos parajes de bojes y hayas y ahora solo son restos de cenizas y troncos ennegrecidos y sin vida. No se adivina ningún resto de vida en el lugar, ni pajaros, ni roedores, ni jabalies, ni ciervos, nada de nada y así será por mucho tiempo.
La humedad de una noche de noviembre, se junta con el olor a cenizas, a hojas secás y a tierra quemada, dando lugar a un olor que resulta incluso desagradable, olor a muerte en el bosque. La erosión provocada por el incendio avanza y no hay signos de recuperación. El lugar no volverá a ser el mismo.
Contaminación luminica de Pamplona
Las estrellas aun siguen en el cielo
Restos calcinados de un boj junto al camino
Restos calcinados de lo que antes eran frescos hayedos
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