Que difícil resulta escribir después de lo ocurrido estos días... Después de todo lo ocurrido, los recuerdos vienen y van...
El fin de semana pasado moría escalando el espolón del Jisu en Picos de Europa Fernando Casquero, junto con sus dos jóvenes compañeros de cordada. Sin duda una gran tragedia. A Fernando lo conocimos en la Travesera unos años atrás. Compartimos juntos en el coche la ruta que va de Arenas de Cabrales al Repelao, donde comienza la prueba... Son momentos de tensión e incertidumbre antes de una carrera de gran dureza como es la travesera y en los que no se habla mucho, pero en los que se comparten sensaciones y sentimientos que unen mucho. Me viene al recuerdo su mujer temerosa antes de la carrera... la carrera es larga y dura y transcurre por terreno de alta montaña y su mujer estaba algo preocupada.
No hablamos demasiado, pero se veía claramente a una persona noble, con una mirada limpia y sincera. Fernando llegó a la meta bastante antes que nosotros, era muy fuerte y marchó para Palencia tras llegar a meta. Después intercambiamos varios mensajes en los que nos daba las gracias por todo y nos decía que había sido un placer haber compartido ese momento. Fernando tenía un historial alpinistico impresionante, con grandes y duras escaladas realizadas y tenía un sueño, ascender a una montaña de 8000 metros.
La vida no debería terminar antes de que los sueños se cumplan, pero por desgracia a veces es así. ¡¡Para nosotros también fue un placer haberte conocido Fernando!!
Y este fin de semana se ha ido Ueli.
No pudimos conocerlo todo lo que nos habría gustado, pero tuvimos la suerte de poder compartir con él y con su mujer Nicole la expedición al Shisha Pangma en el año 2014. Fueron 20 días más que suficientes para comprobar su calidad humana.
Ese año la montaña estaba en muy malas condiciones y con mucha nieve acumulada y una avalancha acabó con la vida de Sebastian y Andrea, por los que Ueli, nada pudo hacer. En esa ocasión Ueli salvó la vida, pero fue arrastrado por la avalancha y podría haber sido él... Recuerdo que Ueli bajo de la montaña destrozado y con lágrimas en sus ojos por no haber podido hacer nada por ellos. El sábado pasado no pudo ser y una caída le costó a él la vida en el Nupse.
Durante la expedición que compartimos en el Shisha tuvo detalles con nosotros que no es fácil ver por esos lugares y que nunca olvidaremos. Ueli siempre nos trató con la mayor amabilidad posible, a pesar de que lo único que nos unía era nuestro amor por las montañas y haber conocido a Iñaki. Recuerdo estar montando la tienda de campaña en el campo 2, a 7000 metros de altura en medio de una ventisca con mucho frío y ver salir a Ueli de la suya para ayudarnos a montar la nuestra... son detalles difíciles de olvidar, o como me ofrecía sus caramelos de hierbas suizas cuando me oía toser.
Ueli partió hacia la cima del Shisha a pesar de la cantidad de nieve acumulada en la montaña en compañía de los integrantes de la expedición Dynafit. Nosotros ya estábamos aclimatados y dudábamos si ascender con ellos o no, pero él era consciente del riesgo que existía y nos recomendó esperar. Al día siguiente se veían envueltos en una avalancha cerca de la cima Oeste y a la vista está, que el consejo que nos dio fue bueno.
Más allá del gran alpinista que se va, está la gran persona que fue...
¡¡Gracias Ueli!! ¡¡Gracias por todo y mucha fuerza Nicole!!
El domingo subimos al Perdiguero por el valle de Literola y allá desde las alturas los tuvimos muy presentes.
Disfrutamos como nunca de esas sensaciones que solo vivimos en las montañas y que nos hacen sentirnos vivos. De ese tesoro tan valioso para nosotros y que compartimos con Fernando y Ueli,
¡Hasta la vista Fernando! ¡Hasta la vista Ueli!