TIBET 2015 Parte III






Después de terminar el trekking del Kailash pasamos tres días visitando esta parte del Tibet y el primer día acampamos junto al monasterio de Kyunglung. Para llegar allí recorremos desde Menshixiang en unas 2 horas una polvorienta pista que pasa por el monasterio de Gurugyan y que lleva hasta Kyunglung. 


Se trata de un monasterio situado junto a una pequeña aldea en un lugar realmente remoto del Tibet y desprende una enorme tranquilidad.

Visitamos el monasterio y recorremos sus alrededores, donde hay unos baños termales que aprovechamos para pegarnos un chapuzón de agua caliente, aunque un poco fétida.


 Kyunglung


Montañas de cornamentas de yaks con éstas se apilan junto a las piedras en las que los tibetanos escriben sus oraciones...

Edificios del monasterio y alrededores de Kyunglung

Manis, banderas de oración y cornamentas de Yak abundan en el lugar...




Camino de los baños termales


Fantástica "bañera" natural





El entorno es precioso


 Y dormimos bajo un manto de estrellas

Al día siguiente desayunamos y visitamos el pueblo situado junto al monasterio y pasamos la mañana tranquilamente hasta que vuelve nuestra furgoneta.

De Kyunglung salimos camino del Lago Manasarovar, y pasamos por varios monasterios a los que hacemos la obligada visita. La pena es que en su interior no está permitida la toma de fotografías, al menos a los "turistas", y no puedo poner más que alguna foto furtiva...

 Monasterio de Gurugyan 



La mayoría de monasterios están reconstruidos ya que fueron destruidos durante la revolución cultural en los años 50. Se han reconstruido intenando que sean lo más parecidos a los originales posibles, como aquí en Titarpuri.

Una de las salas del monasterio de Khorzhak


Y por fin, tenemos el Gurla Mandatha delante. 

Y por fin llegamos al Lago Manasarovar. Se trata del lago de agua clara más alto del mundo y está a más de 4500 mts de altura. Es un lugar sagrado y de peregrinación, donde coincidimos con muchos peregrinos que dan caminando la vuelta al lago, lo que viene a costarles unos 25 días de trayecto...

Sin duda otro sitio con una energía muy especial...


 En las orillas del lago Manasarovar podemos ver grupos de peregrinos que dan la vuelta al lago. Algunos, como estas dos mujeres lo hacen arrastrándose y andando les cuesta 25 días... 


 Lago Mansarovar y Gurla Mandatha.


 Con el Kailash siempre en la lejanía


Descansamos junto al monasterio de Thubolgo Gompa.

Al día siguiente seguimos camino hacia la base del Gurla Mandatha por pistas de tierra polvorientas...

Ya tenemos muy cerca el Gurla Mandatha que es una auténtica mole. Es una montaña de grandes dimensiones y aprovechamos las distintas perspectivas durante el viaje para estudiar la ruta de ascenso que vamos a seguir y que sigue la ruta normal por su cara Noroeste.

El tiempo nos está dando unos magníficos días y esperamos que eso se mantenga para intentar nuestro ascenso.


 Imagen del Gurla Mandatha desde las cercanía de su base


 Otra imagen del Gurla Mandatha

Aun nos queda por solventar el último escollo antes de subir al campo base y nos dirigimos a un poblado cercano para intentar contratar caballos o yaks para subir al campo base. Al final y después de una cierta tensión el contacto de agencia consigue con los lugareños contratar mulas con las que subiremos parte del material hasta el campo base.


Campamento a los pies del Gurla Mandatha.




Al final todo va según lo previsto y parece que por fin llegaremos a ese lugar, el campo base, que tanto nos ha costado alcanzar y por el que tantos quebraderos de cabeza nos hemos llevado... Pero lo más dificil está hecho, parece que podremos ver el Gurla Mandatha cara a cara...



















TIBET 2015 parte II

Después del treking de Samye a Gandem, tomamos un vuelo al aeropuerto de Ali-Ngari, en el oeste del Tibet. El vuelo nos permite recorrer desde su vertiente norte todos los Himalayas y la claridad de la mañana nos permite disfrutar durante las 2 horas del vuelo de vistas de muchos de los 8000´s del Himalaya, desde el Kangchenjunga hasta el Shisha Pangma.

Aterrizamos en el Aeropuerto de Ali-Ngari y nada más salir del avión sentimos el aire frío y puro del Tibet... Se comprueba fácilmente como el viento es mucho más frío que en la zona cercana a Lhasa. El aeropuerto de Ali-Ngari es el segundo más alto del mundo, después del de Daocheng en la vecina provincia de Xinjiang. Se encuentra a una altitud de 4260 mts de altitud y sin duda eso se nota. 

Salimos en el vehículo que ha ido a recogernos en compañía del enlace de nuestra agencia y en poco tiempo nos percatamos de que estamos en una región muy apartada y de gran aislamiento y tan solo hay pequeñas aldeas, al margen de instalaciones militares y de policía. Estamos en una zona sensible por tratarse de un area fronteriza y se nota una gran presencia militar y policial.


Al fondo disfrutamos de vistas del Himalaya, con Anapurna y Dhaulagiri en la imagen

En el aterrizaje difrutamos de vistas del Himalaya Hindú, con el Nanda Devi de fondo.

Aterrizamos en el aeropuerto de Ali-Ngari, y en las inmediaciones solo hay pequeños poblados.

Todo está rodeado de montañas muy poco visitadas y que van de los 5000 a los 6000 mts.

Vamos a la localidad de Ali, única población de cierta entidad y que está en pleno crecimiento favorecida por la rápida colonización que los chinos están promoviendo en el Tibet. 

El paisaje en ocasiones se torna desértico.

Y después de 3 horas de viaje por las carreteras del Tibet, por fin tenemos una visión del Gurla Mandatha a lo lejos...

Se trata de una gran montaña de más de 7600 metros que emerge de la planicie del Tibet, con un desnivel de 3000 metros desde su base.

Toda una mole donde destaca su gran pared de orientación norte, con más de 1000 metros de desnivel.


El Gurla Mandatha

Pero primero realizaremos el circuito del Kailash.

Este circuito da la vuelta a la montaña en sentido horario, en lo que budistas e hinduistas denominan la "Khora", siendo ésta una tradición para los practicantes de estas religiones.

El Kailash tiene una altitud de 6638 mts y es una de las montañas más sagradas del mundo, no habiendo sido ascendido nunca (que se sepa...).

En su cumbre habitan diversas divinidades en función de la religión de que se trate y sus distintas ramas. Además en sus laderas nacen importantes ríos que también se consideran sagrados, como el Indo, el Shatadru o el Brahmaputra.

Es fácil entender porque el significado de su nombre en tibetano es "preciosa joya de nieve".


La visión del Kailash, nos impacta, está claro que tiene una energía especial...

Y desde la localidad de Tarchen también podemos disfrutar de bellas vistas del Gurla Mandatha.


Una antigua leyenda asocia al Kailash a una figura masculina y el Gurla Mandatha a una femenina y estando los dos frente a frente, vivirían una historia de amor, con el lago Manasarovar en medio que simbolizaría el sol... La verdad es que la región está inundada de misticismo y las leyendas como ésta son muy habituales.

Después de dirigirnos por carretera de Ali a Tarchen, descansamos en un guest-house y al día siguiente comenzamos el treking del Kailash que realizaremos en dos días. 

En total son 53 kilómetros que son bastante llevaderos, sin excesivos desniveles, si bien hay que cruzar un collado a 5600 mts de altura, el Dompa-La, pero ya llevamos parte de la aclimatación hecha del anterior trekking, por lo que no se presentará mayor problema. 


Piedras talladas con oraciones y craneos de yak, elementos sagrados y que aparecen por doquier...

Las piedras están talladas con oraciones escritas en sanscrito

Todas con las mismas inscripciones

Comenzamos a caminar con el Gurla Mandatha como telón de fondo.

Piedras talladas por todas partes como pequeños altares...

Y el Gurla en la lejanía

Y doblando el valle y entrando en el mismo aparece el Kailash


Grandes horizontes



La primera etapa termina en este punto, un campamento junto al monasterio de Dhirapuk a 5050 mts

Visitamos el monasterio de Dhira-Puk que está en un marco impresionante frente al Kailash y donde se aprecia una gran espiritualidad.

Uno de los ríos sagrados que nace en el Kailash

La montaña frente al monasterio

La morada del Dios Shiva, Dios de la destrucción según el Hinduismo.

Y morada del buda Demchok según los budistas

El segundo día salimos muy temprano, varias horas antes del amanecer, junto con otros peregrinos tibetanos o hindús, algunos del los cuales de elevada edad o incluso algún niño pequeño. Hace mucho frío y los tibetanos van ataviados con sus sencillas ropas. Algunos caminan en completa oscuridad y no se como son capaces de caminar sin caer. Hace mucho frío y se va incrementando conforme subimos al collado Dolma-La de 5630 mts de altitud.

Allí el terreno está "inundado" de banderas de oración y los peregrinos realizan ofrendas al llegar al mismo. Resulta realmente espectacular ver su alegría en ese punto, donde su peregrinación pasa a ser más llevadera.

Ahora ya solo resta descender el valle que queda por delante hasta Darchen. El camino aun es largo y en algunos puntos monótono, pero bajamos a buen ritmo y se nos hace llevadero.

Peregrinos en Dompa-La.

Banderas de oración en Dompa-La.

El paisaje rebosa de banderas de oración.


Y se inicia el descenso al valle

Hay personas de todas las edades



Terminamos el trekking y nos despedimos del Kailash, aunque su presencia nos acompañará durante toda la expedición en la lejanía... ¡¡Pero eso ya será en otra entrada del Blog!!