En esta ocasión nos vamos a las profundidades de la tierra y visitamos la cueva de Basaura. Se trata de una cueva situada a escasos 20 km de Estella, en la Sierra de Loquiz. La cueva tiene unos 8 kilometros de desarrollo horizontal con dos pisos de desarrollo. La parte superior presenta poca actividad y resulta facil de recorrer.
En el interior podemos encontrar perezosos ejemplares de murcielago como el de la primera imagen y que ni se inmutan por nuestra presencia.
En el interior podemos encontrar perezosos ejemplares de murcielago como el de la primera imagen y que ni se inmutan por nuestra presencia.
Tras un primer momento en el que nos resulta complicado encontrar la continuidad de las galerías, encontramos una estrecha gatera por la que continua la cueva. Recorremos durante varias horas largas galerías, nos arrastramos por estrechas gateras, cruzamos lagos y lodazales, trepamos por las humedas paredes. En todo momento no perdemos la vista los numerosos cruces que encontramos y que podrían éxtraviarnos en el regreso. La orientación en las galerías subterraneas no es sencilla y por si acaso disponemos de el mapa de la cueva, pero no obstante no podemos descuidarnos.
Ahí van unas fotos de este mundo subterraneo que se encuentra tan cercano a nosotros, pero que a la vez resulta tan desconocido.
Ahí van unas fotos de este mundo subterraneo que se encuentra tan cercano a nosotros, pero que a la vez resulta tan desconocido.
Perezoso Murcielago junto en las primeras galerías de Basaura
Salida de la "gatera", de 10 metros de longitud y 35 cm de altura
Después de un "baño" inevitable en una poza
Preciosas galerías
Sala final
Gatera apretada ya buscando la salida
En la cueva son escasas las formaciones, pero alguna podemos apreciar
Boca de salida
Abandonamos la cueva y todo queda oscuro y en silencio, como antes de nuestra llegada, imperturbable
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